Las puertas de garaje , que suelen usarse todos los días, pueden verse sometidas a un uso excesivo y los abridores pueden estropearse y dejar de funcionar correctamente.
Si esto sucede, no asuma que es necesario reemplazar algo, ya que es posible que simplemente se requieran algunas reparaciones que no implican mucho dinero ni el uso de herramientas especializadas.
Soluciones 1
El abridor no funciona ni con el mando a distancia ni con el interruptor de pared, en cuyo caso hay varias soluciones posibles.
Quizás sea de sentido común, pero asegúrate de estar lo suficientemente cerca de la puerta para que el control remoto funcione; te sorprendería cuánta gente no lo hace correctamente y piensa que el problema es más complejo de lo que es. Si la puerta funciona bien con el interruptor de pared, cambia la pila o reprograma el control remoto.
Soluciones 2
Examine la puerta para ver si tiene algún daño, como raspaduras o golpes de automóviles, ya que algo tan pequeño como una abolladura puede impedir que la puerta funcione correctamente.
Asegúrese de revisar los soportes del dintel y de la puerta para ver si se han aflojado con el tiempo, ya que apretarlos solucionará cualquier problema de alineación. Es recomendable revisar esto regularmente, incluso si la puerta funciona. También podría ser necesario inspeccionar el conector entre la polea y el motor; si nota demasiada holgura, podría ser necesario ajustarlo. Sin embargo, tenga cuidado de no apretarlo demasiado, ya que esto también puede causar problemas.
Soluciones 3
Si la puerta del garaje se cae al soltarla, es probable que los resortes de extensión estén desgastados y deban reemplazarse.
Si la puerta del garaje se abre sola, es probable que los resortes de extensión sean demasiado fuertes y deban reemplazarse por unos más ligeros. Si la puerta del garaje se atasca al abrir o cerrar, conviene revisar los rodillos metálicos y las bisagras, ya que podrían necesitar lubricación o los rieles podrían estar sucios, bloqueados o desalineados.